¿Qué necesitamos los profesionales de salud en formación en el Perú para convertirnosen líderes del aprendizaje-servicio para reducir el sobrepeso, la obesidad o la diabetesmellitus e incrementar
- elblogdelaseccion1
- 4 dic 2024
- 8 Min. de lectura
Realizado por Jair Hidalgo
“Cada persona en este mundo, es otro mundo aún más complejo”. En realidad, decir que
la humanidad merece igualdad implica reducir muchos aspectos a lo general puesto que
no todos pasan por la misma situación y no han experimentado lo mismo que los demás.
La salud en la vida de una persona es un tema muy delicado ya que determina la calidad
de vida, el rendimiento y la productividad. Por lo tanto, problemas tan comunes como el
sobrepeso, la obesidad o la diabetes mellitus deberían ser abordados por los profesionales
de la salud para transformar a estos grupos en mejores versiones de sí mismas. En el Perú,
según datos de 2023, el Perú experimentó un incremento significativo en las tasas de
obesidad y sobrepeso en la población adulta: la obesidad afectaba al 26,3 % de la
población adulta en las zonas urbanas, y al 14 % de la población en las zonas rurales.
Asimismo, el sobrepeso afectaba al 38,2 % de la población urbana y al 32,9 % de la
población rural (1).
Está científicamente demostrado que la educación netamente teórica es inútil. Cuando la
información solo se transmite de manera pasiva sin involucrar a la otra parte para que
lleve a cabo la acción, el conocimiento seguirá almacenado en su memoria hasta perderse.
Para estos casos, propuestas como el Aprendizaje-Servicio (ApS) son unas herramientas
poderosas que podría trabajar estas problemáticas y, por ejemplo, incrementar la actividad
física y el consumo de una dieta saludable.
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Este ensayo explorará diferentes aspectos a considerar en la aplicación de un adecuado
aprendizaje-servicio, algunas estrategias para su sostenibilidad y se incluirán algunos
desafíos.
Para que un profesional de la salud en Perú pueda aplicar un modelo efectivo de
aprendizaje-servicio, es fundamental que conozca varios aspectos que no solo mejoren
sus propias destrezas personales, sino también las de las comunidades. Algunos elementos
clave a considerar son: a) Conocer al derecho y al revés a la comunidad: Cualquier
programa o plan debería manejar información acerca de la situación actual de la
comunidad y haber realizado un estudio previo de los pobladores para conocer sus
realidades culturales y socioeconómicas. De esta manera, se podrá evitar prácticas y/o
enfoques que incomoden a los pobladores, asegurando así un impacto real y positivo. b)
Reducción de propuestas a cambio de conductas saludables: Llenar de tanta información
a una persona que está involucrándose en un tema por primera vez es contraproducente.
Para estos casos, menos, es más. Seccionar la información clave y necesaria, sobre todo
en un lenguaje fácil de entender, será mucho más comprensible para la comunidad a la
que se esté brindando el servicio. c) Asegurar una atención basada en el amor: Un buen
profesional de la salud en Perú es aquel que sabe cómo tratar a su paciente y sobre todo
aquel que sabe actuar cuando existe un conflicto. Desde el primer saludo hasta la
despedida, la relación que se pueda crear entre ambos es un determinante para asegurar
la continuidad del servicio y evitar una posible resistencia al cambio por parte del
poblador de la comunidad (2).
Para garantizar la sostenibilidad de los programas de aprendizaje-servicio en salud, es
esencial implementar estrategias que permitan mantener las actividades a largo plazo,
maximizando el impacto positivo en las comunidades y enriqueciendo la formación de
los estudiantes. Algunas estrategias clave incluyen: a) Buscar alianzas estratégicas: Para
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la sostenibilidad de proyectos de gran amplitud las relaciones con demás organizaciones
serán fundamentales. Por lo tanto, lograr acuerdos con instituciones de salud, municipios,
ONGs y organizaciones comunitarias incrementará los recursos y generará una mayor
cobertura y alcance. b) Evaluación e impacto a largo plazo: Es crucial llevar un
seguimiento de los resultados, sobre todo en el estilo de vida de los pobladores luego de
haber recibido las capacitaciones. De esta manera, se podrá evaluar cómo el servicio
brindado puede mejorarse para conseguir cambios a largo plazo y así fortalecer a la
comunidad (3). c) Creación de nuevos líderes: Si los profesionales en la salud quieren
volverse líderes, deben tener la capacidad de formar nuevos líderes. La capacitación de
estos nuevos facilitadores servirá para crear una red amplia que tenga mayor campo de
acción y continúe ayudando a más pobladores de la misma u otra comunidad. Estos
nuevos líderes, a pesar de que no sean profesionales quizá, serán de mucha ayuda pues
contarán con un factor clave: la confianza y respeto de la comunidad.
En el Perú, los profesionales de la salud pueden enfrentar desafíos al aplicar el
aprendizaje-servicio. Desafortunadamente, estas barreras están presentes en muchísimas
comunidades. a) Lejanía de la comunidad: Las comunidades rurales o alejadas tienen
difícil acceso a servicios de salud y educación debido a la lejanía y falta de infraestructura.
Esto complica el traslado de equipos y profesionales de salud, afectando la continuidad
de los programas de aprendizaje-servicio (4). b) Falta de formación específica en
aprendizaje-servicio: Muchos profesionales de salud en Perú no reciben capacitación en
metodologías de aprendizaje-servicio, lo cual dificulta la implementación efectiva de
estos programas y el desarrollo de competencias en trabajo comunitario y responsabilidad
social. c) Resistencia al cambio: Lamentablemente, las comunidades no siempre estarán
dispuestas a cambiar sus hábitos y/o conductas, especialmente si han tenido experiencias
previas con programas que no lograron resultados relevantes. Por lo tanto, desde el
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momento 0 es crucial la manera en la que el profesional pueda comunicarse con el
poblador y la conexión que este pueda crear para que transcurra la capacitación sin tantas
trabas (5).
Después de todo lo mencionado anteriormente, puedo decir que, el aprendizaje-servicio,
trabajada en una comunidad adecuadamente, tiene un gran potencial para la formación de
de nuevos líderes y reducción de problemas de salud comunes en el Perú. Las estrategias
que se pueden aplicar son ilimitadas y abiertas a la imaginación siempre y cuando
aseguren que el poblador esté transformando sus hábitos dañinos por conductas cada vez
más saludables. Para dar este gran paso, es fundamental que el profesional de la salud
conozca bien a quien está ayudando y sepa dirigirse a él de una forma asertiva y con amor.
Por otro lado, la sostenibilidad de proyectos así será difícil de lograr si no se cuenta con
estrategias como la creación de alianzas, evaluaciones de impacto y formación de nuevos
líderes. Además, los retos como la lejanía, débil formación de profesionales y/o la
resistencia estarán presentes, por lo menos uno de ellos. Por tales motivos, es importante
el desarrollo de una vocación para con las ciencias de la salud. Implementar con éxito el
aprendizaje-servicio no es una tarea sencilla; sin embargo, “los sentimientos de amor
hacia el ser humano estimulan la vocación de servicio que no es otra cosa que un profundo
amor a la vida”.
Bibliografía
1. CEPLAN. Observatorio Nacional de Prospectiva [Internet]. Gob.pe. [citado el 10
de noviembre de 2024]. Disponible en: https://observatorio.ceplan.gob.pe/ficha/t14
pág. 5
2. de Hevia IA. APRENDIZAJE SERVICIO SOLIDARIO: UNA PROPUESTA
PEDAGÓGICA INNOVADORA. RIDAS [Internet]. 2016 [citado el 10 de
noviembre de 2024];(2):3–32. Disponible en:
3. Unirioja.es. [citado el 10 de noviembre de 2024]. Disponible en:
4. Unirioja.es. [citado el 10 de noviembre de 2024]. Disponible en:
5. Edu.ar. [citado el 10 de noviembre de 2024]. Disponible en:
Nov 10, 2024
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“Cada persona en este mundo, es otro mundo aún más complejo”.
En
realidad, decir que la humanidad merece igualdad implica reducir muchos
aspectos a lo general puesto que no todos pasan por la misma situación y no
han experimentado lo mismo que los demás. La salud en la vida de una
persona es un tema muy delicado ya que determina la calidad de vida, el
rendimiento y la productividad. Por lo tanto, problemas tan comunes como el
sobrepeso, la obesidad o la diabetes mellitus deberían ser abordados por los
profesionales de la salud para transformar a estos grupos en mejores
versiones de sí mismas.
En el Perú, según datos de 2023, el Perú experimentó
un incremento significativo en las tasas de obesidad y sobrepeso en la
población adulta: la obesidad afectaba al 26,3 % de la población adulta en las
zonas urbanas, y al 14 % de la población en las zonas rurales.
Asimismo, el
sobrepeso afectaba al 38,2 % de la población urbana y al 32,9 % de la
población rural (1).
Está científicamente demostrado que la educación
netamente teórica es inútil. Cuando la información solo se transmite de
manera pasiva sin involucrar a la otra parte para que lleve a cabo la acción, el
conocimiento seguirá almacenado en su memoria hasta perderse. Para estos
casos, propuestas como el Aprendizaje-Servicio (ApS) son unas herramientas
poderosas que podría trabajar estas problemáticas y, por ejemplo,
incrementar la actividad física y el consumo de una dieta saludable.
Este
ensayo explorará diferentes aspectos a considerar en la aplicación de un
adecuado aprendizaje-servicio, algunas estrategias para su sostenibilidad y se
incluirán algunos desafíos. Para que un profesional de la salud en Perú pueda
aplicar un modelo efectivo de aprendizaje-servicio, es fundamental que
conozca varios aspectos que no solo mejoren sus propias destrezas
personales, sino también las de las comunidades.
Algunos elementos clave a
considerar son: a) Conocer al derecho y al revés a la comunidad: Cualquier
programa o plan debería manejar información acerca de la situación actual
de la comunidad y haber realizado un estudio previo de los pobladores para
conocer sus realidades culturales y socioeconómicas. De esta manera, se
podrá evitar prácticas y/o enfoques que incomoden a los pobladores,
asegurando así un impacto real y positivo. b) Reducción de propuestas a
cambio de conductas saludables: Llenar de tanta información a una persona
que está involucrándose en un tema por primera vez es contraproducente.
Para estos casos, menos, es más. Seccionar la información clave y necesaria,
sobre todo en un lenguaje fácil de entender, será mucho más comprensible
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para la comunidad a la que se esté brindando el servicio. c) Asegurar una
atención basada en el amor: Un buen profesional de la salud en Perú es aquel
que sabe cómo tratar a su paciente y sobre todo aquel que sabe actuar
cuando existe un conflicto. Desde el primer saludo hasta la despedida, la
relación que se pueda crear entre ambos es un determinante para asegurar la
continuidad del servicio y evitar una posible resistencia al cambio por parte
del poblador de la comunidad (2). Para garantizar la sostenibilidad de los
programas de aprendizaje-servicio en salud, es esencial implementar
estrategias que permitan mantener las actividades a largo plazo,
maximizando el impacto positivo en las comunidades y enriqueciendo la
formación de los estudiantes.
Algunas estrategias clave incluyen: a) Buscar
alianzas estratégicas: Para la sostenibilidad de proyectos de gran amplitud las
relaciones con demás organizaciones serán fundamentales. Por lo tanto,
lograr acuerdos con instituciones de salud, municipios, ONGs y
organizaciones comunitarias incrementará los recursos y generará una mayor
cobertura y alcance. b) Evaluación e impacto a largo plazo:
Es crucial llevar un
seguimiento de los resultados, sobre todo en el estilo de vida de los
pobladores luego de haber recibido las capacitaciones. De esta manera, se
podrá evaluar cómo el servicio brindado puede mejorarse para conseguir
cambios a largo plazo y así fortalecer a la comunidad (3). c) Creación de
nuevos líderes: Si los profesionales en la salud quieren volverse líderes, deben
tener la capacidad de formar nuevos líderes. La capacitación de estos nuevos
facilitadores servirá para crear una red amplia que tenga mayor campo de
acción y continúe ayudando a más pobladores de la misma u otra
comunidad.
Estos nuevos líderes, a pesar de que no sean profesionales quizá,
serán de mucha ayuda pues contarán con un factor clave: la confianza y
respeto de la comunidad.
En el Perú, los profesionales de la salud pueden
enfrentar desafíos al aplicar el aprendizaje-servicio. Desafortunadamente,
estas barreras están presentes en muchísimas comunidades. a) Lejanía de la
comunidad: Las comunidades rurales o alejadas tienen difícil acceso a
servicios de salud y educación debido a la lejanía y falta de infraestructura.
Esto complica el traslado de equipos y profesionales de salud, afectando la
continuidad de los programas de aprendizaje-servicio (4). b) Falta de
formación específica en aprendizaje-servicio:
Muchos profesionales de salud
en Perú no reciben capacitación en metodologías de aprendizaje-servicio, lo
cual dificulta la implementación efectiva de estos programas y el desarrollo
de competencias en trabajo comunitario y responsabilidad social. c)
Resistencia al cambio: Lamentablemente, las comunidades no siempre
estarán dispuestas a cambiar sus hábitos y/o conductas, especialmente si han
tenido experiencias previas con programas que no lograron resultados
relevantes. Por lo tanto, desde el momento 0 es crucial la manera en la que el
profesional pueda comunicarse con el poblador y la conexión que este pueda
crear para que transcurra la capacitación sin tantas trabas (5).
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