"El Mensaje de la Teología de la Liberación y la Medicina Basada en el Amor para la Salud Pública del siglo XXI en el Perú"

Elaborado por Briggith Geraldine Oroncoy Carhuamaca

Toda persona a lo largo de la historia tiene diferentes percepciones acerca de la definición de la palabra teología; la teología actualmente hoy busca ser inherente a una vida de fe, muy auténtica y plena, a pesar de que en cada comunidad existan diferentes esbozos de la palabra teología como se dijo anteriormente, pero siempre ha de traer reflexión, fuerza y vigor. El Perú, al igual que muchos países de América, enfrenta desafíos relevantes en el entorno de la salud pública. Las brechas de desigualdad, la falta de acceso equitativo a servicios de salud y las condiciones socioeconómicas adversas son algunos de los problemas que afectan a millones de peruanos. Frente a este contexto, dos enfoques aparentemente distintos, pero profundamente complementarios han surgido como marcos de referencia para la reflexión y la acción: la Teología de la Liberación y la Medicina Basada en el Amor. Ambos ofrecen una visión crítica y transformadora que pone a la dignidad humana en el centro, abogando por un sistema de salud que sea más inclusivo, mutuo y orientado al bienestar integral de la comunidad peruana.

La teología ha cumplido diversas funciones a lo largo de la historia de la comunidad cristiana con diferentes enfoques, aunque haya estado más en raizada con la vida espiritual alejada del lado mundano. A partir del siglo XIV ocurre una división de lo teólogo con lo espiritual, la función espiritual de la teología es tan importante en los primeros siglos que fue partícipe de una dimensión permanente. Aunque en los siglos anteriores la teología se caracterizó por alejamiento de lo mundano y camino hacia la santidad, en los últimos siglos se renueva y se observa desde otras perspectivas concretas de la vida. Dios junto al mensaje evangélico nos revela que, ante la relación con otros hombres, se trate de revalorizar la presencia y su actuar. Dios convoca y encarna a la comunidad de fe que se entrega al servicio de todos los hombres, es una exigencia de acción pastoral, de compromiso y servicio hacia los demás. Un factor importante es la importancia del accionar humano en el cual se despierta la conciencia humanitaria que tiene de sí mismo y de su relación activa hacia los demás, donde siempre el hombre busca realizarse Por otro lado, la Medicina Basada en el Amor aboga por una práctica médica centrada también en el ser humano y en el amor como motor de la acción terapéutica. Más allá de la verdadera aplicación de tratamientos, esta corriente plantea que el acto médico debe ser una relación de profundo respeto y empatía entre el médico y el paciente. En un sistema de salud frecuentemente burocratizado y deshumanizado, donde los pacientes a menudo son tratados como números en una larga lista de espera, la Medicina Basada en el Amor exige una revisión del rol del profesional de la salud. El esfuerzo de inteligencia y la fe hará que el propio hombre haga una reflexión de sí mismo y a la vez contribuya adjuntamente con la transformación del mundo que conducirá necesariamente a la construcción de una fraternidad y de comunión. Todo ello lleva a percibir mejor el compromiso, concreto creativo y de servicio hacia los demás. La palabra teología no solo debe de ser un pensamiento crítico sino de fundamentos que aluda constantemente a una reflexión crítica, con actitud lúcida y crítica a las condiciones económicas y socioculturales. Recordar a la vez que reflexionar en mundo significa tomar importancia no solo al entorno cercano sino salir de fronteras de las iglesias; estar abiertos al mundo con un pensar racionalista y justificadora, liberándose para que se evite el fetichismo e idolatría. Si bien el contexto de globalización y neoliberalismo ha fortalecido sistemas de salud fragmentados y desiguales, estas filosofías invitan a pensar en un sistema que ponga a la vida humana y al bienestar colectivo en el centro de su misión. La Teología de la Liberación aporta una crítica profunda a las estructuras injustas que perpetúan la desigualdad en el acceso a la salud, mientras que la Medicina Basada en el Amor ofrece una metodología para humanizar la atención médica y hacerla más cercana y afectiva. En conjunto, estas corrientes podrían servir de base para políticas públicas que prioricen a las comunidades más vulnerables, como las poblaciones indígenas y rurales del Perú, quienes históricamente han sido marginadas del sistema de salud.

Como resumen, el Perú se enfrenta a la disyuntiva de seguir replicando un sistema de salud dispar o apostar por un modelo más justo, inclusivo y centrado en el ser humano. La Teología de la Liberación y la Medicina Basada en el Amor proporcionan marcos éticos y prácticos para guiar esta transformación. Ambas filosofías subrayan la importancia del respeto por la dignidad humana y el compromiso con las comunidades más indefensas. Al incorporar estos principios en la salud pública, se puede obrar por un futuro donde la recuperación no sea solo un acto médico, sino una manifestación de justicia y amor hacia los más vulnerados. Bibliografía: Sigueme.es. [citado el 27 de octubre de 2024]. Disponible en: https://www.sigueme.es/docs/libros/teologia-de-la-liberacion-r2022-web.pdf